martes, 19 de enero de 2021

EL SAN SEBASTIÁN DE FERNÁN CABALLERO

 

El 11 de marzo de 2020, la Organización Mundial de la Salud declaraba la pandemia a nivel mundial por Covid-19; una pandemia que transformaría nuestra sociedad y cambiaría decisivamente lo más cotidiano de nuestras vidas.

A lo largo de la historia, desde que el ser humano empezó a organizarse en sociedad y a crear núcleos de personas que convivían juntos en un mismo espacio territorial, las enfermedades contagiosas tomaron un especial protagonismo. A medida que la población mundial fue creciendo, cuando una enfermedad se extendía y afectaba a varias regiones del planeta, convirtiéndose en una amenaza para la población, se empezaron a documentar las primeras pandemias.

Una de ellas, fue la peste negra, viviendo la humanidad el peor brote de su esta enfermedad a mediados del siglo XIV (entre 1346 y 1353), dejando números estremecedores de víctimas.

Es en esa alta Edad Media, y en siglos sucesivos, cuando diversos municipios de la geografía española se acogen al patrocinio de san Sebastián, encomendándose a él en distintas oleadas de peste.

Si bien no hay documentación escrita que acredite el porqué del patrocinio de san Sebastián en la localidad de Fernán Caballero, el mártir cristiano es venerado en el municipio manchego cada 20 de enero.

EL PATROCINIO DE SAN SEBASTIÁN


No existe constancia en las Relaciones Topográficas de Felipe II que justifique la celebración histórica de san Sebastián en el municipio de Fernán Caballero. En otros municipios, como Albaladejo, Alcoba o Alhambra, ya desde el siglo XVI, sí se imploraba la intercesión del mártir cristiano para detener la peste. “[…] y san Sebastián que también huelgan por la pestilencia”, se refiere para el caso de Alcoba.

Sobre Fernán Caballero, las mencionadas Relaciones Topográficas refieren que: “Guárdase en esta villa por voto la fiesta de San Agustín y votóse porque el Señor nos guardase los panes y frutos de la langosta que la había en aquel tiempo mucha”. Se parte entonces de la idea de que ya anteriormente al siglo XVI se venían celebrando tributos en honor de San Agustín en el municipio manchego de Fernán Caballero, pero no se encuentra ninguna referencia al otro patrono.

No obstante, considerando que de forma generalizada se ha implorado a san Sebastián para detener oleadas de peste negra, es posible que sea ese mismo el motivo de su celebración en Fernán Caballero.

El papa Cayo otorgó a san Sebastián en el siglo III el título de Defensor de la Iglesia, considerándose, desde entonces, como uno de los santos sanadores, al invocarlo contra la peste y contra la muerte súbita e inesperada. En su hagiografía no queda clara la relación la peste, pero se le atribuye el cese de la peste que asoló a Roma en el 680. San Sebastián, como se verá más adelante, fue martirizado con flechas. El martirio de las flechas podría ser entonces el elemento que le vincule a la peste, ya que tanto en el cristianismo como en la cultura grecorromana, la flecha está asociada a la peste; así, Apolo la extiende entre los griegos en el canto primero de la Ilíada, y en la Biblia es uno de los cuatro azotes de Dios (Ezequiel, 14,21), asociada a las flechas por el pasaje del Apocalipsis en donde se cuenta la apertura de los cuatro primeros sellos, dando a la peste arco y flechas como arma.

Los fernanducos, por tanto, históricamente veneraría a sus patronos por dos necesidades básicas: el alimento y la salud. A san Agustín, por conservar las cosechas, la despensa, el trabajo, mientras que acudían a san Sebastián para pedirle por la protección de la saludo.

LA TALLA DE SAN SEBASTIÁN

Si bien san Sebastián, jefe de la cohorte pretoriana en Roma, era muy apreciado por sus emperadores coetáneos, Dicleciano y Maximiano, cuando la condición de cristiano de san Sebastián llegó a oídos de Dioclesiano, éste ordenó que fuese muerto a flechazos por sus propios compañeros. Lo llevaron al campo, lo desnudaron y lo asaetearon. Creyéndolo muerto, lo dejaron, pero esa misma noche, santa Irene, lo desató del árbol y se lo llevó a su casa para curarle las heridas. Una vez restablecido, san Sebastián volvió al palacio imperial para recriminar al emperador su actitud hacia los cristianos. Dioclesiano lo mandó apresar de nuevo y ordenó que lo apalearan hasta morir.

La representación más extendida de san Sebastián es situar al santo en su primer martirio y siendo sus principales atributos: arco, flechas y tronco de árbol.

Sólo en el siglo XX, se han conocido hasta tres imágenes de san Sebastián, aunque siempre con dos de los tres atributos anteriormente señalados, las fechas y el tronco de árbol.

En relación a la primera de ellas, no ha sido posible determinar su antigüedad. Fue destruida hacia 1936. “Se han destruido todas las imágenes” (testimonio de Maximiliano Santos, alcalde, y Tomás Segura, secretario, de fecha 12 de mayo de 1939) y “se destrozó la iglesia parroquial, quemándose imágenes, altares y ornamentos de culto” (conclusiones del fiscal instructor en fecha 16 de mayo de 1945) en Causa general de Ciudad Real, Rama separada correspondiente al pueblo de Fernán Caballero, legajo 1027, expediente 5, incoada en virtud de la ley de 9 de febrero de 1939 de Responsabilidades Políticas (Boletín Oficial del Estado, 13 de febrero de 1939).

Interior de la Iglesia de Nuestra Señora de Gracia. Sebastián Morales.

La segunda talla de san Sebastián se adquiere durante las tareas de restauración del templo religioso de Fernán Caballero, en torno a 1940. “
La iglesia parroquial de Nuestra Señora de Gracia […] ha sido completamente restaurada, tanto en imágenes como en ornamentación, contribuyendo a esta obra los vecinos del pueblo y, en particular, el General Herrera, don Pascual Crespo, don Diego Morales, don César Crespo y muchas más personas piadosas” (Lanza, 25 de agosto de 1944).

Pocos años después, esta segunda imagen – que desde 1989 se encuentra en la ermita del municipio – sería reemplazada por otra tercera, la actual. Es la forma más habitual de representación, atado a un árbol, atravesado por tres flechas, como símbolo de los clavos de Cristo.  

Esta circunstancia de tener tres tallas en el siglo XX encuentra similitud con el otro patrono, san Agustín. Una destruida durante la Guerra Civil, una segunda realizada entre 1939-1940 y la actual.





LA HERMANDAD

Como se refiere en Fernán Caballero y su historia. Desde su fundación hasta los inicios del siglo XIX, “en Fernán Caballero, según el Censo mandado realizar por el Conde de Aranda al Conde de Banajiar en 1770, existían dos cofradías y hermandades: la del Santísimo Cristo de la Vera Cruz y la del Santísimo Sacramento. […] Ambas Hermandades del Santísimo y de la Vera Cruz eran muy antiguas y ya son nombradas en las visitas pastorales que se hacían desde Toledo. Así, en 1689, don Antonio de los Cabrios las nombra […] ”. Asimismo, el párroco de Fernán Caballero, en relación a los archivos perdidos durante el periodo 1936-1939, indica: “lo desaparecido de este Archivo Parroquial […] y destruido fue lo siguiente […] dos libros en pergamino de actas de la Hermandad de la Vera Cruz comprendiendo desde el año 1654 al 1726 con profusión de datos y notas muy curiosas y de gran valor histórico considerados como lo de más valor histórico que existía en la localidad”. No aparecen, aún, referencias a una Hermandad de San Sebastián.

La Hermandad de San Agustín y San Sebastián se organiza hacia el año 1923, apareciendo una primera referencia en prensa al año siguiente: “por la tarde será sacada la imagen procesionalmente por las calles de costumbre, acompañará la hermandad en pleno” (El Pueblo Manchego, 1 de septiembre de 1924). Veinte años después, el número de hermanos ascendía al centenar, cifra muy exigua si se comparase con la actual. “… constituida su Hermandad a la que pertenecen en número aproximado del centenar” (Lanza, 25 de agosto de 1944).

Durante la Segunda República, en aplicación del artículo 27 de la entonces vigente Constitución de 1931, “las manifestaciones públicas del culto habrán de ser, en cada caso, autorizadas por el Gobierno”. No se tiene constancia, por escrito, de que ninguna procesión de San Sebastián no fuera autorizada entre los años 1931 y 1935. Es más, en esta cuestión, la relación entre los distintos Gobernadores civiles y las autoridades locales de Fernán Caballero, fue fluida: “Hemos llegado a este cargo con una bien centrada decisión de amparo y respeto para todas las ideas, y reciente está el caso de la procesión celebrada con nuestro permiso en Fernán Caballero, autorización basada en la garantía de orden ofrecida por aquella Alcaldía” (palabras de Ramón Fernández Mato, Gobernador civil de Ciudad Real, en La Voz, 19 de julio de 1932).

No obstante, hasta 1972, siendo obispo de Ciudad Real, D. Juan Hervás Benet, no se erige canónicamente la Hermandad de Agustín y San Sebastián y se aprueban los correspondientes Estatutos, con el objeto de: “procurar la gloria de Dios mediante el culto y la devoción a San Agustín y San Sebastián, imitando las virtudes de su vida”. En el preámbulo de los mismos, se manifiesta: “Que habiendo visto y examinado el expediente instruido a instancia del Rvdo. Cura Ecónomo de la Parroquia de Fernán Caballero, para la erección canónica y aprobación de los Estatutos de la Hermandad de San Agustín y San Sebastián, que existe desde tiempo inmemorial, pero sin erección canónica”, encontrando justificación la existencia tradicional de la Hermandad.



DIA DE LICENCIA

Las ferias y fiestas de Fernán Caballero por san Agustín, con corridas de toros, música, verbenas, fuegos artificiales, atracciones y festejos suponían un alto en las labores agrícolas (Lanza, 25 de agosto de 1944) y eran muy conocidas en la prensa regional. Por el contrario, los posibles festejos en relación con la celebración de san Sebastián no se plasman en la hemeroteca. Es más, hasta una época muy posterior, el día de san Sebastián era un día de actividad administrativa (Sesión plenaria del Ayuntamiento de Fernán Caballero, 20 de enero de 1940).

A modo de ejemplo, para 1935, se habían declarado festivos los días 28, 29 y 30 de agosto (Sesión plenaria del Ayuntamiento de Fernán Caballero, 7 de agosto de 1935). Hasta entonces, no ha encontrado ninguna referencia en relación a que el día 20 de enero, festividad del otro actual patrón San Sebastián, fuera declarado día festivo.

Según el Anuario de 1904, el municipio ciudadrealeño celebra fiestas los 28 y 29 de agosto. El primer día, festividad del patrón; el segundo, para que tuvieran lugar los encierros. No aparece aún ninguna alusión a días feriados por san Sebastián.

LA CELEBRACIÓN DE SAN SEBASTIÁN: CARIDADES, RAMO DE LAUREL Y NARANJAS

Es imposible pensar en San Sebastián y no verlo acompañado de su rama de laurel con caridades y naranjas.

Desde tiempo inmemorial, por esta festividad, se venía elaborando un dornillo – una cantidad muy pequeña – de caridades, que decoraban el ramo de árbol que procesionaba junto al santo.

La caridad de San Sebastián es una masa a base de harina, agua, vino, aceite, anís en grano y otros ingredientes.

La elaboración de las caridades de san Sebastián formó parte de la tradición del pueblo durante muchos años, no en el caso de la elaboración de panecillos de san Antón, el otro dulce de enero, cuya elaboración se remontaba al año 1985 (Lanza, 18 de enero de 2001). Existen otros municipios donde la caridad está también vinculada a la celebración de san Sebastián, como Pozuelo de Alarcón (Madrid).

Antiguamente había familias o vecinos que hacían promesas y donaban los ingredientes necesarios para la elaboración de este dornillo de caridades: una familia donaba el vino blanco necesaria, otra el aceite que se requería y así hasta completar todos los ingredientes necesarios.

El ramo con las naranjas pequeñas y las caridades era subastado tras la procesión. La poca cantidad de caridades que se elaboraban y la estrechez económica para participar en la puja del ramo provocaban que la mayor parte de los vecinos de Fernán Caballero no pudieran probar las caridades. La caridad era por tanto muy preciada y guardada con cariño. Prueba de ello es que aún hay vecinos que guardan caridades de hasta 80 años.

En años más recientes, se pensó que era justo que todos los vecinos tuvieran la oportunidad de probar las caridades. Comenzó entonces a sustituirse la subasta del ramo de San Sebastián por la rifa del mismo, con el fin de que el azar determinase qué vecinos pudieran probarlas. Asimismo, comenzó a incrementarse el número de caridades elaboradas, ya no sólo para colgarlas en el árbol, sino para la venta entre los vecinos. La cantidad fue aumentando hasta las 5.500 a 6.000 caridades que se venían elaborando en los últimos años. El año 2019 fue el último año que se elaboran caridades en Fernán Caballero.

El ramo de laurel también es difícil encontrarle una explicación. El laurel ha estado relacionado desde la antigüedad con el triunfo. Los emperadores romanos eran coronados con laurel y a los vencedores en un combate también se les coronaba con él. Cuando Jesucristo hizo su entrada en Jerusalén, las gentes le recibieron con palmas y laurel. La costumbre también se da en el municipio madrileño de Pozuelo de Alarcón.

En cuanto a las naranjas, es una fruta típica de la fiesta de san Agustín en Fernán Caballero, y también en otros municipios, como Lillo (Toledo), en el que los vecinos llevan un cesto de naranjas, las cuales son bendecidas y se reparten, después de la Misa mayor, entre los vecinos.

No dejemos que estos tiempos de crisis sanitaria nos roben lo que más nos pertenece: la alegría de vivir. Aunque ya sabemos que son tiempos complicados, no caigamos ni en la apatía ni en el desánimo. Mientras llegan tiempos mejores, acudamos a la memoria cercana y recordemos cómo nuestros mayores han sabido organizarse en tiempos también complicados y ser razonablemente felices, entregando lo mejor de su vida por el bien de la familia.


Lanza, 24 de enero de 1990


Lanza, 18 de enero de 2001


FUENTES DE REFERENCIA

BIBLIOGRAFÍA

 

CAMPOS Y FERNÁNDEZ DE SEVILLA, F. Javier. Los pueblos de Ciudad Real en las Relaciones topográficas de Felipe II. Diputación de Ciudad Real. 2009.

CARMONA MUELA, Juan. Iconografía de los santos. Editorial Akal. 2008.

JIMÉNEZ RUIZ, Alberto y María Patrocinio. Fernán Caballero y su historia. Desde su fundación hasta los inicios del siglo XIX. Instituto de Estudios Manchegos. 2017.

 ARTÍCULOS

 

Imágenes de Cofradía el Encuentro (http://cofradiaelencuentro.es/Capitulos/Imagenes/ESCULTORES.htm).

 REVISTAS Y PERIÓDICOS

Anuario

El Pueblo Manchego

Lanza.

Festejos de san Antón y san Sebastián (Depósito legal CR 1015-2014)

Historia National Geography (https://historia.nationalgeographic.com.es/a/grandes-pandemias-historia_15178)

FUENTES DOCUMENTALES

Archivo municipal Excmo. Ayuntamiento de Fernán Caballero.

Biblioteca Nacional de España. Hemeroteca Digital (http://www.bne.es/es/Catalogos/HemerotecaDigital).

Boletín Oficial de la Provincia de Ciudad Real (http://bop.sede.dipucr.es/buscadorHistorico).

Centro de Estudios de Castilla-La Mancha (https://www.uclm.es/centros-investigacion/ceclm)

Ministerio de Cultura y Deporte (http://prensahistorica.mcu.es/)